El Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR) informó que el jueves 13 de marzo, a partir de las 23:08 horas, las estaciones de monitoreo del volcán Lanín detectaron un enjambre de 62 eventos sísmicos de tipo volcano-tectónicos (VT) en un lapso de cinco horas. Estos fenómenos están asociados al fracturamiento de rocas en el interior del sistema volcánico.
A pesar de la actividad registrada, el nivel de alerta técnica se mantiene en verde, lo que indica que no hay riesgo inminente de erupción. El Observatorio Argentino de Vigilancia Volcánica (OAVV) continúa monitoreando el volcán en coordinación con el Observatorio Volcanológico de los Andes del Sur (OVDAS) de Chile y comunicará cualquier cambio significativo.
Según el informe, los eventos no han causado afectaciones en el territorio argentino ni han sido percibidos por las poblaciones cercanas. Aunque la actividad sísmica es considerada anómala para los niveles de base del Lanín, no se observaron cambios en otros parámetros de monitoreo que sugieran una desestabilización del sistema volcánico.
Sobre el volcán Lanín
El Lanín, ubicado en el extremo sudeste de la cadena volcánica Villarrica-Quetrupillán-Lanín, es un estratovolcán con una altura de 2.500 metros sobre el nivel del terreno. Su estructura está compuesta principalmente por coladas de lava basáltica y andesítico-basáltica, con depósitos piroclásticos en menor proporción. Su cima está cubierta por un importante casquete glacial.
Aunque no ha registrado erupciones en tiempos históricos ni presenta actividad fumarólica, se considera un volcán activo debido a la presencia de conos adventicios bien preservados y leyendas indígenas que sugieren actividad prehispánica reciente.
El Lanín se encuentra dentro del Parque Nacional Lanín en Argentina y del Parque Nacional Villarrica en Chile, cerca de áreas pobladas y zonas turísticas. La región recibe una gran cantidad de visitantes cada año, lo que subraya la importancia del monitoreo constante para garantizar la seguridad de las comunidades locales y los turistas.
Por ahora, las autoridades mantienen la vigilancia y aseguran que no hay motivos para alarmarse, aunque la actividad sísmica reciente refuerza la necesidad de seguir de cerca cualquier cambio en el comportamiento del volcán.
compartí